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Mañana
en la batalla piensa en mí
Colección:
ALFAGUARA LITERATURA
ISBN: 84-204-4231-3
Páginas: 464
Como
sucede en las últimas novelas de Javier Marías, la primera
frase ya dice mucho, quizá demasiado: "Nadie piensa nunca que
pueda ir a encontrarse con una muerta entre los brazos y que ya no
verá más su rostro cuyo nombre recuerda".
Esto es lo que le ocurre al narrador de su nueva y extraordinaria
novela. Víctor Francés es guionista de televisión
y "negro" o "escritor fantasma", encargado de redactar los discursos
de los hombres importantes e ignorantes. Divorciado recientemente,
es invitado a cenar a su casa por Márta Téllez, mujer
casada cuyo marido está de viaje en Londres y madre de un niño
de casi dos años. Tras la cena galante, el hombre y la mujer
pasan al dormitorio, donde, "aún medio vestidos y medio desvestidos",
Marta Téllez empieza a sentirse mal hasta que agoniza y muere
en una escena sobrecogedora. Esa infidelidad no consumada se convierte
así en una especie de "encantamiento", con problemas bien reales
e inmediatos: qué hacer con el cadáver, avisar o no
avisar, qué hacer respecto al marido, qué hacer con
el niño dormido, qué diferencia hay entre la vida y
la muerte. Víctor Francés tomará pronto sus decisiones,
o más bien no las tomará y se irá dejando llevar
por sus pasos, inofensivos unas veces y otras envenenados. Conocerá
a la familia de su muerta, al padre, Téllez, viejo académico
y cortesano; al marido, Deán, con su capacidad de comprensión
y de inclemencia infinitas; a la hermana menor, Luisa, a quien seguirá
sin propósito. Y se irá poniendo en situación
de contar su secreto a quienes no debe. En un Madrid invernal y nocturno,
dominado por la niebla o por las tormentas como una isla sitiada,
el narrador se convertirá en una sombra que no quiere ni busca
nada y, sin embargo, va encontrando: al Unico, para quien deberá
escribir un discurso, en una hilarante escena palaciega; a su amigo
Ruibérriz de Torres, aficionado al hipódromo y que lleva
pintada en la cara su esencia de sinvergüenza; a la puta Victoria
de otra larga noche de su pasado en la que confundió su rostro
con otro nombre. Y entretanto una maldición va resonando: "Mañana
en la batalla piensa en mí, y caiga tu espada sin filo: desespera
y muere".
Una vez más, la escritura asombrosa de Javier Marías
sume al lector en un hechizo del que no querrá salir. Con aún
mayor fuerza que en sus anteriores éxitos, Todas las almas
y Corazón tan blanco, el autor logra una intensa
narración sobre algunos asuntos que nos atañen a todos:
sobre el ocultamiento, sobre los hechos y las intenciones, sobre el
actuar sin saber, sobre la voluntad que casi nunca se cumple, sobre
la negación de las personas que una vez quisimos, sobre el
olvido que hace de todo "viaje hacia su difuminación lentamente",
sobre la indecisión, sobre la despedida y finalmente sobre
el engaño, que quizá "es nuestra condición natural,
y en realidad no debería dolernos tanto".
Mañana
en la batalla piensa en mí [Otras ediciones]
Anagrama, 1994
Alfaguara, 1996 con un epílogo ('Lo que no sucede y sucede')
y las notas del autor
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